A prueba de amor.
Te entregué mi corazón, a ciegas.
No me quise dar cuenta de que el tuyo estaba amurallado y no dejaba paso a ningún tipo de sentimiento amoroso.
Y así fue como yo sola (o quizá fue tu actitud fría) me hice añicos.
No me quise dar cuenta de que el tuyo estaba amurallado y no dejaba paso a ningún tipo de sentimiento amoroso.
Y así fue como yo sola (o quizá fue tu actitud fría) me hice añicos.
Comentarios
Publicar un comentario