Sin querer o queriendo acabamos perdiendo.
¿Cuántas veces nos habremos quedado sin oportunidades por el miedo o
la vergüenza a la hora de hacer algo? ¿Cuántas veces hemos perdido por
ni siquiera intentarlo? ¿Cuántas veces estás dispuesto a perder por
tonterías? ¿Cuántas veces decepcionaste por prometer sin haber tenido
intenciones de cumplir? ¿Cuantas veces hemos confiado sin tener motivos
para hacerlo? Podría tirarme días enteros formulando preguntas como
estas pero todas ellas me llevan a la misma respuesta, y es que son
muchas las veces que pierdes, que te decepcionan o te fallan, son muchas
las veces en las que confías y te traicionan, sin querer o queriendo
acabamos perdiendo siempre o la mayoría de las veces.
Comentarios
Publicar un comentario